El lechón asado es el plato estrella de Cuba para celebraciones. La piel dorada y crujiente, la carne jugosa y aromática, son el resultado de un proceso de cocción lento y cuidadoso, que impregna el aire con su irresistible aroma.
El aroma agridulce del lechón asado impregna la casa, atrayendo a todos hacia la cocina.
La piel dorada y crujiente invita a darle un mordisco, revelando la carne jugosa y llena de sabor.
En cada bocado, se fusionan los sabores de la tradición y el buen comer.
Lechón asado
Ingredientes
1 Cerdo entero mediano
2 Limones
5 Naranjas agrias
4 Cabezas de ajo
2 cucharillas de Comino en polvo
2 cucharillas de Pimienta
2 cucharillas de Oregano
3 Hojas de laurel
3 cucharas de Sal
Preparación
Paso 1 : El lechón se limpia, retirando las vísceras y colgándolo para escurrir.
Paso 2 : En un recipiente mediano, se mezclan el jugo de limón y naranjas agrias, comino, orégano, pimienta, ajos y hoja de laurel.
Paso 3 : Se reserva la sal.
Paso 4 : Se punza el lechón y se le agrega el adobo preparado, asegurándose de que se distribuya uniformemente.
Paso 5 : Se deja reposar en la nevera durante toda la noche, sin congelarlo.
Paso 6 : Al día siguiente, se retira y se deja a temperatura ambiente.
Paso 7 : Se espolvorea sal por todo el lechón.
Paso 8 : Se amarra en la púa, asegurando las patas con alambre.
Paso 9 : Se sella con otro alambre toda la parte abierta.
Paso 10 : Se enciende el carbón en un hoyo en la tierra y se colocan las orquetas en ambos extremos del hoyo.
Paso 11 : Se gira la púa lentamente sobre el fuego durante 4 a 6 horas, hasta que esté bien dorado, sin líquido en su interior y con la piel crujiente.
Paso 12 : Finalmente, se retira y se puede disfrutar.