La Crema Floridita es una versión sencilla de la famosa receta cubana. Se prepara con mariscos, vegetales, especias y vino, cocinados lentamente para intensificar los sabores. Una delicia que deleitará a los amantes de la cocina de mar.
La Crema Floridita combina delicados mariscos con una mezcla de especias que realzan su sabor y aroma. Es un plato que requiere paciencia y cuidado en su preparación, resultando en una crema suave y reconfortante.
El toque final de la langosta picada en brunoise añade un contraste de texturas que deleitará a quienes la prueben.
Ingredientes
350 gramos de Cabeza de langostas
250 gramos de Cabezas de camarones
50 gramos de Manteca de cangrejos
300 gramos de Masa de cola de langosta
300 gramos de Tomate natural
20 gramos de Ajos puerros
100 gramos de Cebollas
100 gramos de Zanahoria
50 gramos de Cebollino
1 Hoja de laurel
1 pizca de Pimienta en grano
50 gramos de Apio
120 gramos de Harina de trigo
30 gramos de Mantequilla
1 pizca de Sal
1 ½ litro de Caldo de pescado
30 mililitros de Aceite
30 mililitros de Vino blanco
Preparación
Paso 1 : La receta comienza cortando el ajo y la masa de langosta ya cocida en brunoise.
Paso 2 : Luego se procede a cortar el resto de los vegetales en concasse, y a machacar las cabezas de langosta y camarones, extrayendo la manteca de los cangrejos.
Paso 3 : Después, se fondean las cabezas de los mariscos en aceite caliente, se agregan los vegetales, las especias y el caldo de pescado, y se deja hervir por una hora.
Paso 4 : Una vez hecho esto, se filtra utilizando un colador chino.
Paso 5 : En una cazuela de fondo grueso, se elabora un roux con mantequilla y harina, y se agrega el caldo de marisco y pescado poco a poco sin dejar de batir.
Paso 6 : Posteriormente, se añade la manteca de cangrejo, se hierve por 5 minutos más, y se cuela utilizando una estameña.
Paso 7 : Por otro lado, en una sartén aparte se reduce el vino a la mitad y se agrega a la crema.
Paso 8 : Se ajusta el sabor con sal, y al servir se decora con la langosta cocida picada en brunoise.
