Los frijoles negros dormidos, un clásico de la cocina tradicional cubana. Remojados, cocinados con vegetales y especias, y sazonados con vino tinto, resultan en una sopa suculenta e irresistible. Perfecta para disfrutar en familia.
Los frijoles negros descansan lentamente en su olla, absorbiendo los sabores de laurel, ají, ajo y cebolla. Los vegetales se mezclan con especias secas y aceite, creando una jardinera aromática.
El vino tinto añade un toque final, mientras todo se espesa a fuego lento.
Ingredientes
550 gramos de Frijoles negros
40 gramos de Pimientos verdes
6 gramos de Ajos
50 gramos de Cebolla
1 Hoja de laurel
1 gramo de Comino
6 gramos de Azúcar
50 mililitros de Vino tinto
50 mililitros de Aceite vegetal
2 litros de Agua
1 pizca de Sal
Preparación
Paso 1 : Para preparar este platillo de frijoles, comienza escogiendo los frijoles y lávalos.
Paso 2 : Luego, déjalos remojar con la cantidad adecuada de agua en el refrigerador durante al menos 6 horas.
Paso 3 : Una vez transcurrido este tiempo, cocina los frijoles en la misma agua de remojo por aproximadamente dos horas.
Paso 4 : Añade laurel, la mitad de la cantidad de ají, ajo y cebolla cortados de forma irregular, guardando el resto para más tarde.
Paso 5 : Cuando los frijoles estén tiernos, completa la preparación con los vegetales cortados en juliana y el ajo picado finamente.
Paso 6 : Saltea todo en aceite y agrega las especias secas.
Paso 7 : Cocina a fuego lento hasta que los vegetales estén tiernos y sazona con sal.
Paso 8 : Para finalizar, incorpora el vino tinto y deja que la mezcla espese según tu preferencia.